Hay algo raro... es como un sentimiento, una especie de sensación rara que crece en mi pecho.
Hace un tiempo que apareció y la confundí con muchas otras cosas.
Pensé que se trataba de ansiedad, por algo... pero los hechos se sucedían y "el sentimiento" seguía molestando.
Pensé que se trataba de algún tipo de enamoramiento, pero mi corazón divagaba por distintos parajes saciándose de afecto, y "el sentimiento" seguía sin desaparecer.
Quizá no sea nada que haya sentido antes.
Quizá solo se trate de un cambio, de una etapa o algo así.
Siento como si mi ser no cupiera en el espacio que le fue concedido. Como si a mi mente no le alcanzara con un solo cerebro. Es como si me estuviera expandiendo y no tuviera hacia donde. Siento que puedo hacer mucho más de lo que en realidad puedo.
No se lo que será, pero cada vez se hace más presente. Es un poco incomodo cuando queda en primer plano respecto de las demás sensaciones.
Me gustaría leer tu comentario, a ver si tenés alguna idea de que pueda llegar a ser. A lo mejor vos pasaste (o estás pasando) por algo similar.
Aunque creo que muy bien no se entiende, es algo muy difícil de explicar.
domingo, 2 de diciembre de 2007
El sentimiento sin nombre
Dedos inertes.
Estoy sentado frente a la computadora, con la ventanita de mi blog abierta.
Ya elegí la fuente y el tamaño, me acomodo un poco y dejo que la magia fluya a través de mis dedos...
Pero... no. No aparece nada. No salen palabras de mí. No logro verbalizar nada. No me convence ninguna frase.
No se me ocurre nada para escribir... y eso es algo que realmente detesto. Odio estar falto de inspiración.
Lo peor del asunto es que siento, adentro mío, que hay algo que escribir. Hay algo en mi mente, corazón o donde sea, que tiene que salir para afuera. Tengo mucho acerca de que escribir. Pero no lo logro.
Es tristemente insoportable.
Quizá sea el cansancio, quizá sea el aburrimiento, pero hay algo que bloquea mi fluidez.
Algo que mejor que se vaya pronto.
miércoles, 28 de noviembre de 2007
Elegir una identidad.
Me pareció muy interesante y real.
¿Es verdad que elegimos nuestra identidad?
Últimamente se podría confundir.
Estamos constantemente bombardeados con información innecesaria. Mucha de esta información trata de llegar a nuestro cerebrito y hacernos elegir tal o cual cosa.
Y ni hablar de la mentalidad, desde que nacemos que observamos y aprendemos actitudes que se vuelven nuestras costumbres, pero... ¿Las elegimos?
Por otro lado me queda una pregunta por hacer ¿Que és nuestra identidad?. ¿Cambiamos nuestra identidad al cambiar nuestra manera de pensar? ¿Dejamos de ser quienes somos?
Yo creo que elegir una idenidad es posible, es dificil pero posible.
Por eso quiero invitarte a elegir tu propia identidad. Aunque sea una idiota, una identidad estúpida. Por que es preferible elegir ser un idiota a que otro eliga que debemos ser.
Que tan detestable puedo ser.
Y presto atención a los que me rodean.
Hay algo en la forma en la que actuan.
No dan importancia a mis fráses.
Las interrumpen y las ignoran como si no existieran.
Abrí los ojos y me dí cuenta que nada era como creía.
Me había empezado a sentir entendido.
Pero por lo visto eso no es así.
Por lo que veo, yo también resulto hartante.
Yo también soy insoportable.
Yo también soy aburrido.
Yo también soy predecible... detestable.
Pero... siendo quién soy... ¿Qué tan detestable puedo llegar a ser?
¿Cuando llegará el punto en el que ya no les alcanze con ignorarme y tengan que decirmelo en la cara: "Callate"?
Es curioso, muy curioso.
Cuando alguién no me conoce no me habla.
Apenas me conoce, empieza a hablarme.
Cuando me conoce un poco mejor, me habla más.
Y ahí empieza a decaer.
Hasta el punto en el que me ignoran.
Y la curva vuelve a subir.
Y me vuelven a hablar.
Es cíclico.
Es muy probable que a vos esto no te importe.
Pero a mi me parece raro, no se.
Es raro hoy, que justo a todos se les dió por ignorarme.
lunes, 26 de noviembre de 2007
Para vos y para mi.
Pero eso no es lo que me importa. Hay una cosa que me importa mucho más allá de eso. Me importa que vos también dormís. Me importa que vos también sentís. Me importa que vos también sos importante.
Me gusta creer que detrás de todo eso que veo y siento hay una persona, con un corazón.
Si te quiero, es por que me dejaste ver a la persona que hay en vos.
Un abrazo grande a todas las personas que lean esto.
Clara oscuridad
Su sonrisa se había ido a dormir. Sus ojos se habían ido con ella.
Y junto con ellos la calidez de su ser.
Yo estaba muy cómodo en el piso, me encanta dormir en el piso.
Las luces se fueron apagando de a poco, como en una extraña coreografía ideada al azar.
Mientras las luces parpadeaban, se revelaban detalles ante mí, fragmentos, cosas más y menos importantes que había en la habitación. Las bibliotecas de las paredes habían ganado presencia, y los libros en las paredes tenían tanto para decirme.
Pasó alguien caminando por la vereda, sin embargo lo escuché como si estuviera enfrente mío. El silencio era realmente muy poderoso.
Casi no me movía. Me sentía muy confortado en esa clara oscuridad. Confortado por no tener que soportar el frío y el viento. Confortado por estar con la gente que quiero. Confortado por que esta vez había salido todo bien.
También me confortaba que estaría ahí durante la mañana, que esto todavía no había terminado. Todavía hay mucho por lo que reír.
Y caí en el sueño... en esta reconfortante clara oscuridad.
martes, 20 de noviembre de 2007
Las personas
Es, si se quiere, un poema experimental. Con fragmentos intercalados de cada autor. A mi personalmente me gustó. Espero que lo difruten.
Las personas:
a veces te desconciertan un poco
a veces no entiendo algunas actitudes
a veces no entiendo nada de nada
a veces entiendo demasiado
a veces no quisiera entender
a veces necesito entender
a veces me hacen liviano e invencible
a veces me vuelven torpe y vulnerable
a veces me afectan
a veces son indiferentes
a veces los necesito
a veces puedo existir solo
a veces me hacen llorar
a veces se sienten poderosos
a veces me agreden
a veces me abrazan
a veces me miran
a veces caminan solos
a veces me solicitan
a veces me olvidan
a veces creo que me entienden
a veces entiendo que me creen
a veces soy o estoy
a veces me pierdo
a veces se por que lo hago
a veces no
a veces lo pienso
a veces prefiero fluir
Por Federico y Tamara.